Este 31 de julio, además de ser el día de San Ignacio de Loyola, miramos la vida de Miguel Ozieblowski, un sacerdote polaco que murió dando la vida en el campo de concentración de Dachau.

En el corazón de la diócesis burgalesa, Caleruega, conmemoran este 30 de julio especialmente a un beato del siglo XIII, Manés de Guzmá. Este presbítero de la Orden de Santo Domingo colaboró en la predicación de su hermano, que era el propio Domingo. El Papa Gregorio XVI lo declaró beato.

El 29 de julio es la fiesta de San Olaf, el rey noruego que llevó a su tierra el cristianismo. Siendo rey de su pueblo, lo liberó de la idolatría y propagó con gran diligencia la fe cristiana que había conocido en Inglaterra. Acabó muriendo asesinado como mártir por su creencia en Jesucristo.

En el s. III la Iglesia fijó la fiesta de Pascua en el domingo siguiente a la celebración de la Pascua judía. Fue esta alguna de las reformas que impulsó el Sumo Pontífice San Víctor I. Tenemos presente su memoria en este 28 de julio que tiene lugar su onomástica.

En Auschwitz, lugar cercano a Cracovia, la beata María Clemente de Jesús Crucificado Staszewska, virgen de la Orden de Santa Ursula y mártir, fue internada en un campo de exterminio por quienes odiaban la fe, murió a causa de los suplicios a los que fue sometida. Su memoria se recuerda cada 27 de julio.

En La Valetta (Malta) San Jorge Preca se entregó amorosamente como sacerdotea la formación catequética de los niños y fundó la Sociedad de la Doctrina Cristiana, con la misión de testimoniar la Palabra de Dios y propagarla al pueblo. Su santidad se celebra el 26 de julio.

En Madrid, santa María del Carmen Sallés y Barangueras, fundó la Congregación de las Hermanas de la Inmaculada Concepción para la educación de mujeres piadosas e incultas. Su memoria se celebra el 25 de julio.

Este domingo 24 de julio es el día de Santa Cristina de Bolsena. Una Joven, posiblemente romana, martirizada durante los primeros siglos cerca del lago de Bolsena en la región Toscana de Italia.

El beato Basilio Hopko es considerado uno de los muchos sacerdotes y religiosos martirizados por el comunismo. Recordamos su vida y pedimos su intercesión en este 23 de julio.

Recordemos la vida de San Cirilio de Antioquía, que la Iglesia recuerda cada 22 de julio. Siendo un exégeta y defensor de la doctrina de la fe, luchó contra las herejías, especialmente contra Nestorio. En este tiempo afirmó a María con el título de Madre de Dios, que sería proclamado por el concilio de Éfeso. Es venerado tanto en Oriente como en Occidente.