Fecha de publicación: 9 de febrero de 2022

Hijo de Don Francisco Febres Cordero Montoya y de Doña Ana Muñoz Cárdenas. Aquel 7 de Noviembre de 1854, en una colonial casa situada en la calle Real, hoy Bolivar, de la ciudad de Cuenca-Ecuador, señoras vestidas a la española y cholas con policromas polleras, pregonan el suceso: Doña Anita ha dado a luz a un niño. Había nacido el Santo Miguel Febres Cordero.

Antes de ingresar a la Congregación de los Hermanos Cristianos, la admiración de todos los religiosos de esa época subió de grado, cuando se enteraron de que pertenecía a una familia entroncada con uno de los mas eminentes Jefes de la Independencia de Guayaquil, el General Leon de Febres-Cordero y Oberto, primo hermano de su abuelo Joaquin Febres-Cordero Oberto. En 1868 vistió el hábito de los Hermanos Cristianos de La Salle, con el nombre de Hermano Miguel. Se dedicó a la enseñanza y al cultivo de las letras, llegó a ser uno de los mas notables escritores Ecuatoriano.

Fué miembro de la Academia Ecuatoriana de la Lengua y Correspondiente de la Real Academia de la Lengua de España. Las obras didácticas las escribió bajo el seudónimo de G.M. Bruno.

Falleció en Premiá del Mar, el 9 de Febrero de 1910.

En Enero de 1937, durante la Guerra Civil Española, sus restos fueron arrojados de la sepultura, por las milicias rojas, pero el Cónsul del Ecuador en Barcelona, Lic. Colón Serrano, los buscó y envió de regreso a Guayaquil, en el Vapor “Orazzio”; llegaron el 5 de Febrero y fueron conducidos a la capital.

La Orden Lasallana decidió conseguir su santificación en Roma y el 1913 el Hermano Paul Joseph escribió una Biografía en Francés, titulada “Un Religieux Equaterien”.

El 9 de Febrero de 1923 Monseñor Manuel María Pólit inició el “Proceso informativo sobre la vida y virtudes del Hermano Miguel”. Pio XI, firmó el decreto de introducción, a la causa de Beatificación. Paulo VI, lo beatificó el 30 de Octubre de 1977 y Juan Pablo II, lo canonizó el 21 de Octubre de 1984.