Asistieron SSMM los Reyes de España y las Infantas Leonor y Sofía, que acudieron al santuario y a la Santa Misa, donde nuestro arzobispo, D. Javier Martínez, en representación de la Diócesis, y junto a otros hermanos en el episcopado, saludó a los miembros de la Familia Real y concelebró la Santa Misa, así como su participación en los distintos actos conmemorativos de clausura.
“A la histórica vinculación de la monarquía española con el Real Sitio, se unía el hecho de que hace cien años, en la multitudinaria celebración de la Coronación Canónica de la Santina, habían ya acudido los entonces Reyes de España, Alfonso XIII y Victoria Eugenia, visita de la cual se conservan numerosas fotografías y testimonios”, informó la Delegación de Medios de Comunicación del Arzobispado de Oviedo.
La “Puerta Santa”, que era la entrada a la Santa Cueva de Covadonga, se abrió para este Año Jubilar un año antes, el 8 de septiembre de 2017, pasando ante la Santina y orando ante Ella miles de personas.
En su homilía, Mons. Jesús Sanz, Arzobispo de Oviedo, recordó que Covadonga “no es un Santuario mariano únicamente. Este rincón asturiano –dijo– no es sólo un referente espiritual de primer orden, sino también un lugar identitario donde nació el pueblo que aquí tuvo comienzo. No en vano, en el himno a la Santina, cantamos lo que está en la conciencia histórica de nuestras gentes: ‘Bendita la Reina de nuestra montaña, que tiene por trono la cuna de España’”.
Al finalizar la eucaristía, tuvo lugar una ofrenda floral ante la estatua del rey Pelayo, simbolizando así el homenaje al 1.300 aniversario de la batalla de Covadonga y el origen del Reino de Asturias; a continuación, y los reyes destaparon una placa conmemorativa en la fachada de la Casa Capitular del Santuario.