En la Eucaristía de envío presidida por el arzobispo y posterior acto de inicio de curso en el colegio diocesano Virgen de Gracia, con la Delegación episcopal de Educación Católica y Enseñanza Religiosa.
El pasado viernes 17 tuvo lugar la Eucaristía de envío a los profesores de Religión Católica, al término de la cual nuestro arzobispo entregó la Missio Canónica, es decir, la autorización de la Iglesia para que impartan la Religión Católicos en los centros de educación escolar.

La Eucaristía fue presidida por nuestro arzobispo Mons. José María Gil Tamayo en la iglesia parroquial del Sagrario-Catedral, a la que asistieron docentes tantos de centros públicos como de colegios concertados y privados.
La Santa Misa fue concelebrada por el delegado episcopal de Educación Católica y Enseñanza Religiosa, D. Ildefonso Fernández-Fígares, y por el secretario del arzobispo y párroco en San Matías, D. David Salcedo.
“En un tono muy cercano y cariñoso, D. José María agradeció la labor de todos estos profesores en su labor de testimonio y evangelización a través de la enseñanza. Y valoró mucho la importancia del aula de religión pues para muchos alumnos esta clase será la única posibilidad de contacto con la Iglesia y de acercamiento a la fe”, informó la Delegación de Educación Católica y Enseñanza Religiosa.
Tras la Eucaristía, Mons. Gil Tamayo repartió personalmente la Missio Canónica a los profesores de Religión Católica de la escuela pública y concertada. “Fue un momento muy emotivo y simbólico, que expresó visiblemente la naturaleza de enviado y misionero del profesor de Religión, quien trabaja en nombre de su obispo”, señalaron.
En esta convocatoria también se celebró la primera reunión de los profesores de Religión del nuevo curso 2025-26, cuyo acto se desarrolló en el colegio diocesano Virgen de Gracia.
Allí, el delegado de Educación Católica y Enseñanza Religiosa impartió una charla titulada “El Trabajo y la Catequesis: La especificidad del profesor de Religión”.
