El pasado día 1 de septiembre, la parroquia de San Lorenzo, en Zagra, acogió la visita del Sr. Arzobispo de Granada con motivo de la celebración del Sacramento de la Confirmación.
La renovación del misterio de Pentecostés siempre es motivo de gran júbilo en la Iglesia. En este caso, cinco jóvenes del pueblo recibieron el Espíritu Santo durante la misa presidida por D. José María y concelebrada por el párroco, D. Ángel Luis.
Durante su homilía, el Arzobispo resaltó que recibir el Espíritu Santo supone un cambio de vida. Así ocurrió en Pentecostés, cuando los apóstoles, hombres con un gran miedo y muchas dudas en aquellos momentos, vieron fortalecida su fe y comprendieron que estaban llamados a dar testimonio de la muerte y resurrección de Cristo. Dejaron atrás el temor y la cobardía para proclamar el amor de Cristo desde la alegría y la esperanza. El Arzobispo animó a los cinco jóvenes confirmandos a experimentar ese mismo cambio a través del Sacramento de la Confirmación. Sólo el cambio sincero, que ocurre verdaderamente de corazón, cuando se reconoce el bien que se experimenta al recibir los dones del Espíritu Santo, es el que nos lleva a los creyentes a cambiar el mundo.
Tras la finalización de la celebración eucarística y en señal de agradecimiento, la parroquia obsequió a D. José María con una botella de vino, otras dos de aceite de oliva virgen extra y un tarro de miel ecológica, frutos del trabajo de los hombres y mujeres del pueblo.
Posteriormente, los padres y familiares de los jóvenes confirmados obsequiaron a todos los asistentes con un ágape, durante el cual el Sr. Arzobispo tuvo ocasión de dialogar con los asistentes, compartiendo las inquietudes e ilusiones de los feligreses e interesándose por la vida de la parroquia.
Para esta pequeña comunidad parroquial del poniente granadino ha sido una gran satisfacción la visita de nuestro Arzobispo, que esperamos que se haya sentido acogido por todos. Pero, sobre todo, ha sido especialmente gratificante celebrar que cinco de sus jóvenes, tras varios años de formación en nuestra fe católica y de preparación para el sacramento, han recibido los dones del Espíritu Santo. Todos deseamos, con la intercesión de la Virgen María, en su advocación zagreña de Virgen de los Dolores, que el Espíritu Santo les ilumine y les dote de sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y amor a Dios, para que consigan alcanzar una vida plena en Cristo.
Esperamos que D. José María tenga a bien volver a visitar nuestra parroquia cuando lo estime oportuno. Los zagreños siempre estaremos deseosos de volver a verle y compartir con él nuestra fe.
Parroquia de Zagra