Fecha de publicación: 31 de julio de 2022

Cerca de Munich, ciudad de Baviera, en Alemania, en el campo de concentración de Dachau, beato Miguel Ozieblowski, presbítero y mártir, el cual, ocupada Polonia, su patria, por un régimen político contrario a la religión, fue expatriado y encarcelado por su fe, y en prisión, donde fue torturado, alcanzó el martirio.

Nació en el seno de una familia obrera y numerosa en Izdebno, Polonia, el 28 de septiembre de 1900. Ingresó en el seminario a los 22 años, pero contrajo la tuberculosis y estuvo a punto de tener que desistir de su vocación sacerdotal.

Por fin pudo volver al seminario en 1934 y ordenarse sacerdote en Varsovia el 11 de junio de 1938. Enviado a la parroquia de San Lorenzo de Kutno como coadjutor, llevó adelante con gran celo su misión.
Ocupada Polonia por las tropas alemanas, fue arrestado el 6 de octubre de 1941 y llevado al campo de concentración de Lad. Al poco fue trasladado al campo de Dachau, donde no soportó los malos tratos, el hambre y los trabajos forzados, falleciendo de agotamiento el 31 de julio de 1942.
Hombre piadoso y manso, dejó una estela de bondad en cuantos le conocieron. Fue beatificado por Juan Pablo II el 13 de junio de 1999.