La Eucaristía ha sido presidida por el Arzobispo de Granada, Mons. Javier Martínez, y concelebrada por el Obispo de Guadix, Mons. Ginés García, y casi un centenar de sacerdotes. Junto a ellos, han asistido también cientos de granadinos que han llenado el templo catedralicio, entre ellos sus familiares y numerosos fieles y amigos, a quienes cuidó y atendió en sus años de tarea pastoral en distintas parroquias desde que fuera ordenado en el año 1973, así como los fieles de su actual parroquia en El Chaparral donde ha sido velado.

Al término de la Eucaristía, D. Miguel Peinado recibió el último adiós a las puertas de la Catedral con un sonoro y unánime aplauso por parte de los presentes.

“UNA VIDA SACERDOTAL PRECIOSA”
En su homilía, Mons. Javier Martínez habló del testimonio que ha sido la vida sacerdotal de D. Miguel Peinado. Nuestro Arzobispo también aludió a su propio testimonio compartiendo los últimos días de vida del presbítero diocesano, señalándole que “el altar que en esos momentos tenía era la propia cama del hospital” y que “allí estaba ofreciendo la Eucaristía, esa que de una manera sacramental, misteriosa, ha ofrecido él y todos nosotros tantas veces en el altar de la Iglesia. Y sin embargo, en algún momento, ese altar lleva nuestro cuerpo y es nuestro cuerpo lo que ofrecemos, no pan y vino”. En este sentido, continúa Mons. Martínez, “él asentía con la cabeza en la invitación a esa ofrenda de la vida por el bien de la Iglesia, por la salvación de todos”, un gesto que “recoge la historia de una vida sacerdotal preciosa”.

COMUNIÓN Y FIDELIDAD
Antes de la bendición final, Mons. Javier Martínez subrayó la comunión de D. Miguel Peinado con su ministerio episcopal, al mismo tiempo que destacó su fidelidad en su servicio a la Iglesia y colaborador con el pastor de la Diócesis granadina. En sus palabras, nuestro Arzobispo ha recordado la vida sacerdotal preciosa de D. Miguel Peinado, que siempre ha vivido con gran conciencia de comunión su servicio a la Iglesia de Granada y su colaboración con nuestro pastor.

Mons. Javier Martínez explicó que D. Miguel Peinado Muñoz ha nacido a la vida verdadera (“dies natalis”) y está en brazos de Jesucristo y en su casa que es el Cielo. Asimismo, Mons. Martínez recordó que en este mundo estamos en tinieblas y nuestra mirada se abre por completo en el encuentro con Dios para la vida eterna.

La homilía completa de D. Javier Martínez en el funeral de D. Miguel Peinado Muñoz está disponible en www.archidiocesisgranada.es (Multimedia, audio), y en el siguiente enlace: http://www.archidiocesisgranada.es/media/com_podcastmanager/Homilia_Mons._Martinez_funeral_Miguel_Peinado.mp3

D. MIGUEL PEINADO MUÑOZ

D. Miguel Peinado Muñoz nació en Granada el 1 de junio de 1949 y recibió la Ordenación Sacerdotal el 19 de marzo, fiesta de San José, del año 1973. Su último destino pastoral ha sido la parroquia San Isidro en El Chaparral y fue Administrador Diocesano en 2002 cuando Mons. Antonio Cañizares fue nombrado Arzobispo de Toledo, hasta el 1 de junio de 2003, fecha en que Mons. Javier Martínez tomó posesión de la sede granadina.

D. Miguel Peinado Muñoz estudió Ciencias Bíblicas en Roma y se doctoró en Teología por la Facultad de Teología de Granada. Fue Vicario General entre 2002 y 2006; Rector del Seminario Mayor en 2005; y fue el primer Director del Instituto de Teología “Lumen Gentium”, en 2008, fundado por Mons. Javier Martínez para la formación teológica en la Archidiócesis. También fue profesor en dicho Instituto de Teología de la Archidiócesis.

Entre sus responsabilidades al servicio de la Iglesia, D. Miguel Peinado Muñoz fue Delegado de Apostolado Seglar, Delegado Diocesano de Formación Permanente y Delegado Episcopal para la Pastoral Juvenil, así como canónigo de la S.A.I Catedral durante el tiempo que fue Vicario General. Fue miembro del Consejo Diocesano para Asuntos Económicos y del Consejo de Consultores.