Llamamos al Jueves Santo día del amor fraterno y todos tenemos la certeza en nuestro corazón de que lo que hace atractiva la vida son los gestos de amor, los gestos de entrega, los gestos de donación, y cuanto más gratuitos, más bellos. Y sin embargo, Señor, si Tú no te hubieras dado a nosotros, si no hubiera ese fondo último de amor que Tú nos has revelado como el ser mismo de Dios, siempre tendríamos la sospecha de si los gestos de amor no serían en el fondo algo estéril, algo inútil, una especie de pirueta en el vacío.
Señor, enséñanos la racionalidad profunda del amor como el único modo humano de vivir, precisamente porque somos imagen tuya.
Padrenuestro
Que estás en el Cielo
Santificado sea tu Nombre
Venga a nosotros tu Reina
Hágase tu Voluntad
En la tierra como en el Cielo
Danos hoy nuestro pan de cada día
Perdona nuestras ofensas
Como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden
No nos dejes caer en la tentación
Y líbranos del mal.
Amén.
+ Javier Martínez
Arzobispo de Granada
2 de abril de 2015
Plaza de las Pasiegas