Fecha de publicación: 20 de mayo de 2024

De los trabajadores de la Curia Diocesana y otros centros, con el arzobispo Mons. José María Gil Tamayo.

Con el deseo de compartir juntos la alegría de la fe en la víspera de la Solemnidad de Pentecostés, y convocados como comunidad cristiana formada por los trabajadores de la Curia Diocesana y algunos otros centros del Arzobispado, el sábado se celebraba una convivencia con el arzobispo de Granada, Mons. José María Gil Tamayo.

Celebrada en el Seminario de espiritualidad Sierra Nevada-Hotel del Duque, junto a los trabajadores también asistían sus familiares, en una jornada de convivencia para fortalecer la comunión fuera del horario laboral en las oficinas. “Es un día de alegría, día de convivencia con las familias. Colaboradores y colaboradoras que hacen posible el trabajo. Reunidos con un sentido de Iglesia, de fe”, señaló el arzobispo en la homilía de la Eucaristía con la que se inició dicha jornada, en la ermita que se halla en el recinto del Hotel del Duque. Los trabajadores de la Curia “sois una comunidad cristiana, una familia, un grupo de Iglesia, unos hermanos”, señala Mons. Gil Tamayo.

Con la invitación a vivir la alegría de la fe que da Cristo Resucitado, “causa de nuestra fe”, incluso cuando las cosas no van bien y también en medio del dolor y sufrimiento, la jornada continuó con el diálogo mutuo y una comida fraterna.

Junto a los trabajadores y el arzobispo, también asistieron los sacerdotes diocesanos D. Enrique Rico, Vicario General; D. Alberto Espinar, secretario canciller del Arzobispado; D. Antonio Luis Martín, consiliario de Pastoral Familiar; y D. David Salcedo, secretario particular del Sr. Arzobispo.