Del Santo Evangelio según San Juan
Sabiendo Jesús que todo había llegado a su término, para que se cumpliera la Escritura dijo: “Tengo sed”. Había allí un jarro lleno de vinagre. Y, sujetando una esponja empapada en vinagre a una caña de hisopo, se la acercaron a la boca. Jesús, cuando tomó el vinagre, dijo: “Está cumplido”. E, inclinando la cabeza, entregó el espíritu.
Señor Jesucristo, hoy veneramos junto a toda la Iglesia tu Santa Cruz y te damos gracias por el don de tu Espíritu Santo, que entregaste a la Virgen y San Juan situados al pie de tu Cruz. Desde aquel momento, habita en tu Iglesia y lo hemos recibido en el Bautismo y la Confirmación. Con su fuerza, pudiste afrontar las burlas, injurias, traición, azotes, coronación de espinas, crucifixión, muerte y sepultura. Y ese mismo Espíritu, entregado desde tu costado traspasado, es el que te hizo salir victorioso de la muerte.
Tú conoces, Señor, la debilidad humana y sabes que la ayuda de tu Espíritu, es más fuerte que el dolor, la desorientación, la amargura, el sufrimiento, la enfermedad, el pecado y la muerte. Asistidos por Él, es posible sobreponerse, para seguirte de con la Cruz de cada día y escuchar tu llamada. Sabemos que nunca fallas a tus amigos y que la obra que has comenzado, se culminará de modo pascual.
Te pedimos Señor, por esta Cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y por su Parroquia de San José de Calasanz. También queremos presentarte a todos los niños y jóvenes que en esta Pascua recibirán los sacramentos de la Primera Comunión y de la Confirmación. Ahora, unidos a ti, por la Gracia de tu Santo Espíritu, nos atrevemos a decir Padre nuestro…
Padre nuestro
Francisco Tejerizo
Vicario Territorial de la Zona I
Viernes Santo, 15 de abril de 2022