En todas las parroquias, iglesias y templos se pedirá la intercesión de los santos y se rezará por el descanso eterno de los difuntos.

El calendario litúrgico nos señala el 1 de noviembre la Solemnidad de Todos los Santos, el día en que festejamos a todos los santos reconocidos por la Iglesia elevados a los altares, testimonio del amor de Dios en sus vidas. Es el día en el que se festeja el santoral completo y los fieles encomiendan a todos ellos sus oraciones. El 1 de noviembre es por ello día de precepto con la asistencia a la Eucaristía.

Ambos días son también una invitación
a profundizar en el misterio de la vida y la muerte,
que conducen a la plenitud en la Vida misma que es Dios

Al día siguiente, el 2 de noviembre, la Iglesia reza especialmente por todos los fieles difuntos, también por quienes no tienen quien rece por ellos, pidiendo a Dios el descanso eterno para todos ellos. Cada día en la Eucaristíase reza por el descanso eterno de nuestros seres queridos difuntos. De manera especial, se reza en este 2 de noviembre, así como por las almas del purgatorio, para que alcancen la gloria eterna a la que estamos llamados por nuestra vinculación filial de hijos de Dios.

En todas las parroquias, iglesias y templos se rezará por la intercesión de los santos el día 1 y por nuestros fieles difuntos el día 2. Cada parroquia establecerá los horarios de las misas, por lo que puede consultarse directamente en su tablón de anuncios o en los horarios de misas en la web www.archidiocesisgranada.es

Ambos días son también una invitación a profundizar en el misterio de la vida y la muerte, que conducen a la plenitud en la Vida misma que es Dios.