Fecha de publicación: 6 de mayo de 2019

Dos internos del Centro Penitenciario de Albolote y otras diez personas recibieron los Sacramentos del Bautismo y la Confirmación, respectivamente, en una celebración presidida por Mons. Javier Martínez, en el propio Centro Penitenciario. Junto a él concelebraron los dos capellanes del centro penitenciario -Mª Victoria Romero y Luis Miguel- y un sacerdote de la Diócesis de Guadix, que participa como voluntario. Le acompañaron “un gran número de voluntarios que dan catequesis en este ambiente complicado de la prisión”, explicó el Director de Pastoral Penitenciaria y Capellán D. Constantin Sorin Catrinescu. “Fue un momento emotivo para los dos internos que recibieron el bautismo junto con los otros dos sacramentos para la iniciación cristiana y los diez que se confirmaron”, explicó D. Constantin Sorin.

La liturgia tuvo lugar en el salón de actos, participando entre 150 y 200 personas en un ambiente de silencio y recogimiento “especial”, señaló esta Pastoral. Todos los sábados esta Pastoral Penitencia celebra una Eucaristía para los internos de este Centro Penitenciario, y en esta ocasión la Santa Misa se ha celebrado de forma especial, dado que se celebraron los Sacramentos de la iniciación cristiana.

MENSAJE DE ESPERANZA
“En la homilía D. Javier ha sido muy cercano y ha trasmitido un mensaje de esperanza, presentando un Dios del cual nunca jamás tienen que desconfiar o pensar que los puede abandonar indiferentemente de la vida que cada uno de los internos haya tenido anteriormente. Muy interesante fue la explicación del sentido del temor de Dios como una virtud que no tiene nada que ver con el miedo, sino más bien con no perder un bien tan grande que es el amor a Dios”, explicó el Director de Pastoral Penitenciaria.

Por su parte, Mª Victoria Romero, también capellana y voluntaria en esta Pastoral, explica que “D. Javier ha destacado la importancia de no quedarnos en lo que vivimos, sino mirar más allá. Y sentirnos queridos. Una experiencia que necesita de los demás. Podemos saber que Dios nos quiere cuando somos queridos por alguien a quien vemos”.

Al término de la celebración, D. Javier entregó a cada uno de los bautizados y confirmandos un pequeño obsequio preparado por la Pastoral Penitenciaria. “Cada uno de los protagonistas han sido acogidos con tanto amor, pero también con gran responsabilidad para que entre todos hagamos posible que esta semana de vida eterna que han recibido crezca y dé frutos”, señaló D. Constantin Sorin Catrinescu.

Paqui Pallarés
Directora Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada