“Dignidad y trabajo” ha sido el lema de las XXX Jornadas diocesanas de Pastoral Obrera y del Trabajo organizadas el 4 y 10 de mayo en nuestra diócesis. En esta última sesión de trabajo tuvo lugar una Mesa redonda en el Centro Cultural Nuevo Inicio en la que se abordaron la vulneración de la dignidad en el trabajo en el ámbito laboral en la provincia de Granada.

Entre los participantes estuvieron presentes D. José María García, Delegado diocesano de la Pastoral del Trabajo junto a Daniel Mesa, Secretario Provincial de CC.OO, Rosario García, Presidenta de la Asociación Nueva Cartuja en defensa de los derechos de las trabajadoras del hogar y Paco Jiménez junto a Lali Ruiz, en representación de UGT y trabajadores del sector de la hostelería.

LO PRIMERO, LAS PERSONAS

En una primera intervención D. José María García enfocó la misión principal que se tiene desde la pastoral de dar prioridad a las personas que se encuentran en los márgenes del mundo del trabajo: jóvenes, inmigrantes, mujeres y desempleados de larga duración para que se produzca un cambio de mentalidad de una espiritualidad para el crecimiento.

“Es necesario fundar el trabajo en condiciones dignas para las personas, teniendo en cuenta el cuidado de la creación. El trabajo es algo verdadera y esencialmente humano”, destacó.

PARO Y BRECHA DIGITAL

Según los datos de Comisiones Obreras en Granada hay un 19% de tasa de paro en Granada, un dato que casi duplica la tasa media nacional. “Curiosamente el paro también condiciona a quienes tienen trabajo”, aseguró Daniel Mesa que también resaltó los efectos de la brecha digital: “Tendemos a pensar que la brecha digital afecta sobretodo a las personas mayores y más bien tiene mucho más que ver con la clase social. La brecha digital está dificultando el acceso al empleo de muchas personas”, aseguró.

El tejido productivo en Granada se caracteriza por ser muy escaso ya que el 24% del empleo en Granada es público. Cerca de un 10% trabaja en la hostelería, 5% en el campo y el resto en otros sectores. Según CC.OO, 1 de cada 3 granadinos tienen un trabajo temporal y solo 33.000 trabajadores en la provincia cobran el salario mínimo interprofesional.

PRECARIEDAD EN LA HOSTELERÍA Y EL SECTOR DOMÉSTICO

Asimismo, Rosario García, presidente de la Asociación Nueva Cartuja expuso la situación actual del empleo en el sector doméstico, un área con un nivel alto de precariedad en el que aún no existen ni convenios, ni regulación, por lo que las personas que se dedican a él conviven constantemente con la ausencia total del reconocimiento de sus derechos. El perfil mayoritario del trabajador en esta área son mujeres extranjeras.

Con respecto al sector de la hostelería, uno de los más desarrollados y también precarizados en la provincia de Granada, “los empresarios en las últimas décadas se están quedando retrasados con respecto a las nuevas legislaciones laborales, reduciendo las posibilidades turísticas y de servicio que podría tener una ciudad como Granada”, afirmó Lali Ruiz.

María José Aguilar
Secretariado de Medios de Comunicación Social