Lo hizo congregando a decenas de fieles procedentes de muchas naciones latinoamericanas, que celebraron juntas en esta Eucaristía el don de la fe dentro de una historia común.
La Eucaristía bajo la advocación de Nuestra Señora de Guadalupe concluyó con varios cantos a la Guadalupana y con un ágape posterior en el que continuaron los bailes y los cantos.
Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada