Con la asistencia de representantes de la Universidad Eclesiástica San Dámaso de Madrid, a la que está afiliado dicho Instituto en Granada, y la Facultad de Teología, Mons. Gil Tamayo ha señalado la necesaria formación de los cristianos en la fe.
El curso académico 2023-2024 del Instituto de Teología Lumen Gentium de la Archidiócesis ha quedado inaugurado esta mañana, tras el acto celebrado en el Seminario Mayor “San Cecilio”, con la asistencia del arzobispo de Granada, Mons. José María Gil Tamayo.
En sus palabras de bienvenida a las instituciones y asistentes presentes en el acto, Mons. Gil Tamayo ha subrayado la importancia para un cristiano que debe ser la formación en la fe: “Nuestra fe tiene que estar formada, y esto vale también para el ámbito de piedad popular”. En este sentido, recordó las tres claves que ya indicó a las hermandades y cofradías de “cultura” como formación, “caridad” y “compromiso”. Sobre el aspecto de la formación, recordó que así lo recogen también en la Carta sobre piedad popular de los Obispos del Sur de España, titulada “María, Estrella de la evangelización”. (LEER CARTA PASTORAL)
“Para mí, es muy importante el quehacer teológico y la formación, así como los sacerdotes y agentes de pastoral”, señaló el arzobispo, aludiendo al mismo tiempo a los catequistas, que es un ministerio en la Iglesia, por su servicio de transmisores de la fe. Una fe formada y de manera permanente, señaló D. José María.
UN ÚNICO ACTO, UN “MISMO QUEHACER”
Para D. José María, ésta es la primera inauguración del curso académico de este Instituto como arzobispo de Granada, a cuya sede episcopal accedió el pasado 1 de febrero, tras ser aceptada la renuncia del arzobispo emérito D. Javier por el Papa Francisco al cumplir los 75 años de edad.
Como avance, Mons. Gil Tamayo anunció para la próxima inauguración un único acto “donde estén presentes todos los centros académicos superiores de teología”, en un “mismo quehacer”, en el que “como nos recuerda el Señor, donde dos o más están reunidos en Su Nombre, Él está en medio de nosotros”.
De igual modo, subrayó la necesaria coordinación de todos los centros superiores y de todos los niveles que se dedican a la enseñanza de la pastoral bíblica y de formación teológica en la Archidiócesis.
Junto al saludo de bienvenida, Mons. Gil Tamayo ha agradecido a la Universidad San Dámaso y a la Facultad de Teología, asistentes al acto, su “colaboración y vuestro trabajo”, extensible a toda la comunidad docente. Asimismo, ha avanzado que el Plan Pastoral Diocesano tendrá como guías el sentido sinodal, junto al sentir de toda la Iglesia universal, de comunión, participación y misión.
La jornada inaugural continuó con la mesa redonda dedicada al 45 aniversario de la elección de Karol Wojtyla como Juan Pablo II. En ella, intervinieron como ponentes Carmen Álvarez Alonso y Óscar Álvarez, junto a los sacerdotes diocesanos David Alcalde e Ildefonso Fernández-Fígares.
EN LA ORACIÓN, CON LA DIÓCESIS DE MURCIA
Previo al acto académico, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en el monasterio de la Cartuja acogió la Eucaristía, en la que se rezó por las víctimas del incendio de la discoteca en Murcia, sucedido ayer domingo, y por sus familiares y amigos, que sufren la pérdida de sus seres queridos.
En su red social de Twitter, Mons. Gil Tamayo expresaba sus condolencias, a las que se une la Archidiócesis de Granada, con el siguiente mensaje: “Unidos a la Diócesis de Cartagena expresamos nuestro pesar por los fallecidos en el incendio de la discoteca de Murcia y nuestra solidaridad con los familiares, a los que aseguramos nuestra oración. D.E.P”.
Paqui Pallarés