Fecha de publicación: 8 de febrero de 2021

La Colegiata de la Asunción de la Abadía albergó esta Solemne Misa, que este año ha tenido lugar en el segundo domingo de febrero. A ella acudieron varios representantes de las autoridades civiles de Granada, junto a decenas de fieles que completaron el aforo del templo.

Junto al cabildo de la Abadía del Sacromonte y de su abad, D. Antonio Fernández-Siles, presidió la Eucaristía el Arzobispo de Granada, D. Javier Martínez. El coro de la Abadía sacramontana acompañó esta celebración, que fue retransmitida por Canal Sur.

GRACIAS POR UNA HISTORIA DE FE

Durante su predicación, el Arzobispo quiso dar gracias por la historia de fe que significa la vida del primer obispo de Granada, más allá de las leyendas sobre su persona. “Yo sé que las leyendas acerca de San Cecilio que están en los libros plúmbeos son eso, leyendas”, empezó diciendo. “Sin embargo, la tradición de que San Cecilio fue el primer obispo de Granada es muy antigua y el hecho de que la fe comenzó muy pronto en Andalucía y estaba muy arraigada en Granada lo sabemos porque el primer concilio de la Iglesia universal, del que se conservan las actas, es un concilio que tuvo lugar en Illiberis muy a comienzos de la primera década del s. IV”.

Una fe que es la que permite afrontar con alegría las circunstancias difíciles de la vida, tal y como recordó Mons. Martínez. “En este momento justo, es cuando la fe es más necesaria, porque cuando parece que tenemos la vida asegurada y todo está como bajo nuestro control, entonces pueden parecernos la fe como un adorno”, apuntó. “Donde parece que ninguna circunstancia de este mundo es favorable a nuestros proyectos o a la tranquilidad, el Señor está junto a nosotros, está con nosotros, está en nosotros”.

EL SEÑOR ESTÁ SIEMPRE CON NOSOTROS

De modo sencillo, Mons. Martínez hizo mención a María Inmaculada, figura central de la histórica Abadía del Monte de Valparaíso. “El ángel le dice a la Virgen una cosa sumamente importante: ‘el Señor está contigo’, y esas palabras del ángel a la Virgen son palabras que la Iglesia quiere hacer suyas y que yo querría gritar al mundo entero: ‘el Señor está con nosotros’”.

En las estas difíciles circunstancias de la pandemia, D. Javier reafirmaba así esa esperanza que supone la presencia del Señor en toda circunstancia. “¡No estamos nunca solos!, porque el Señor está con nosotros, y en medio del desastre nuestra fe nos permite, no solo saber sino experimentar que el Señor está con nosotros y que la vida cambia cuando uno tiene experiencia de que el Señor nos acompaña”, afirmó.

Concluía la Santa Misa con la bendición del Arzobispo a la asamblea, una bendición con la que podía obtenerse la indulgencia plenaria para todos los fieles dentro de las condiciones establecidas por la Santa Sede. A continuación el Arzobispo ofrecía las reliquias de San Cecilio a la veneración de los miembros del cabildo, autoridades civiles y resto de fieles presentes.

Las autoridades, miembros del cabildo y el Arzobispo se encaminaron juntos a la Santas Cuevas para sellar ese voto con una ofrenda floral al santo patrono de Granada.

Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada