Fecha de publicación: 7 de noviembre de 2022

E. F. Schumacher, pensador y economista del más alto nivel internacional, fundador del Grupo de Desarrollo de Tecnología Intermedia, autor del conocido libro Lo pequeño es hermoso: Economía como si la gente importase, al igual que de Una guía para perplejos y Buen trabajo (una publicación póstuma que recoge diferentes artículos del autor), es también autor del presente volumen Esto es lo que creo y otros ensayos, una colección de artículos, publicados en la revista Resurgence entre 1973 y 1977 y de una asombrosa actualidad también hoy.

Aunque estos artículos se escribieron en diferentes momentos y parecen ser heterogéneos, hay un tema común que tiene mucha fuerza en todos ellos. Este tema “pone de manifiesto la integración total de lo espiritual y lo material, lo interior y lo exterior, de lo ideal y lo real, de lo visionario y lo práctico. No hay dualismo en los pensamientos de E. F. Schumacher”. Entre los temas que E. F. Schumacher aborda en sus artículos que se presentan en este libro se encuentran el gigantismo económico occidental y la necesidad de encontrar una nueva economía que mantenga la relación con la escala humana y sostenibilidad; la dignidad y la creatividad del trabajo humano como base de una sociedad sana y productiva; la efectividad y la conveniencia de unos modelos de desarrollo de abajo hacia arriba, con una base local; la aspiración de la producción de bienes con valor “eterno” en vez de “efímeros” para evitar una “cultura de pobreza”; la energía sostenible y no contaminante como base de la sostenibilidad industrial, agrícola y medioambiental; propuestas prácticas sobre cómo aliviar la pobreza y el hambre, y los problemas que estas dos realidades llevan asociados, así como ideas imaginativas para la regeneración urbana y agrícola y para la salud comunitaria. Finalmente, Schumacher comparte algunas de las percepciones ecológicas y espirituales más profundas que han inspirado su trabajo, y que nos ayudan a comprender dónde se ha descarriado nuestro pensamiento y cómo podemos volver al camino correcto.

“¿Cuál es el significado de la democracia, de la libertad, de la dignidad humana, del nivel de vida, de la autorealización, de la felicidad? ¿Es una cuestión de bienes, o de personas? Por supuesto, es cuestión de personas. Pero las personas sólo pueden ser ellas mismas en pequeños grupos abarcables. Por lo tanto, tenemos que aprender a pensar en términos de una estructura articulada que pueda afrontar una multiplicidad de unidades de pequeña escala. Si el pensamiento económico no puede comprender esto, no sirve para nada. Si no puede ir más allá de sus vastas abstracciones, el Producto Interior Bruto, el índice de crecimiento, la relación capital/producto, el análisis de entradas y salidas, la movilidad de la mano de obra, la acumulación de capital, si no puede superar esto y tomar contacto con las realidades humanas de la pobreza, la frustración, la alienación, la desesperanza, la depresión, la delincuencia, el escapismo, el estrés, la congestión, la fealdad y la muerte espiritual, entonces prescindamos de la ciencia económica y empecemos de nuevo” (“La nueva economía”, p. 100).

Editorial Nuevo Inicio