Para ello es necesario concretar el punto en el que se encuentra cada persona en cuanto a formación, habilidades y posibilidades de inserción sociolaboral, de cara a diseñar un programa adaptado a los objetivos profesionales, formación necesaria para conseguirlos y las herramientas para la búsqueda del empleo.
Un total de 250 mujeres y 100 hombres en situación de desempleo de larga duración se han beneficiado de este servicio. La mayoría de ciudadanía española (57%) y extracomunitaria (37%), entre 35 y 54 años, con nula o escasa formación, o incluso sin formación homologada en España, un hándicap para el acceso a la cualificación o recualificación en un oficio.
ENTRENAMIENTO EN COMPETENCIAS DIGITALES
Con más de 2.300 atenciones y una media de 6.8 atenciones por participante (3.3 más que en 2019), además del diagnóstico personalizado, el proyecto ha ofertado 40 talleres formativos para la mejora de competencias básicas y laborales en la búsqueda activa de empleo. Uno de los módulos que han cobrado especial relevancia a raíz de la pandemia, ha sido el entrenamiento de las competencias digitales. Muchas de las personas en riesgo de exclusión acompañadas por Cáritas, padecen los efectos de la brecha digital y carecen de las habilidades básicas necesarias para la gestión de trámites online, como por ejemplo, pedir una cita en el servicio de empleo, enviar un currículum a ofertas laborales, la inscripción en portales de empleo o ETTS on-line, o bien el manejo de aplicaciones móviles para la búsqueda de trabajo.
Sofía Blasco, responsable del Programa de Empleo de Cáritas Diocesana de Granada “en este periodo de pandemia se ha puesto de manifiesto la gigantesca brecha digital que sufren la mayoría de nuestros participantes. Bien porque tienen escasas o nulas competencias digitales, o porque no disponen de ordenador o tablet y conexión a internet en casa. En ocasiones aún teniendo dispositivo móvil no cuentan con la capacidad suficiente o disponibilidad de datos para instalar aplicaciones”.