Ya falta poco para que los titulares de la Hermandad del Amor, la Entrega y la Concepción salgan de nuevo por las calles de Granada. Desde hoy hasta el próximo miércoles esta cofradía irá repartiendo los hábitos y demás enseres para los fieles cofrades que vayan a participar de la próxima salida de su estación de penitencia. Una entrega que se hará entre las 19:30 y 22 horas en la calle Portería Concepción, en los bajos del Monasterio de la Concepción, sede canónica de la hermandad.
Desde esta cofradía confirman que el reparto de papeletas de sitio ha sido un éxito. Los fieles están demostrando así que tienen muchas ganas de poder acompañar a los titulares de la Hermandad el próximo Jueves Santo, algo que no se da en realidad desde el 2018, pues a los dos años de la pandemia se sumó la lluvia del año anterior, que impidió la salida del paso de penitencia.
“Yo creo que la gente lo espera con mucho entusiasmo con muchas ganas. Detecto bastante optimismo en el ambiente”, confiesa el Hermano Mayor, José Arcoya, que también asegura que el tiempo de la pandemia ha servido positivamente a las hermandades y cofradías. “La pandemia ha demostrado la madurez que cada vez tenemos más las hermandades. En otros tiempos quizás se hubiese entendido de otra manera, pero lo cierto es que las cofradías hemos sabido responder muy bien”.
Tanto así, que esta hermandad ha sido una más de las que ha sabido adaptarse colaborando solidariamente con las necesidades sociales de cada momento. La última fue el pasado viernes 18 de marzo, cuando los costaleros de la hermandad contribuyeron a cargar de medicamentos y demás bienes que formaron parte del convoy del arzobispado que salió desde el seminario San Cecilio para ayudar a los ucranianos. Un verdadero anticipo vivo de lo que se celebrará en la salida del Jueves Santo.
EL PERFUME DE LA CONVERSIÓN
Esta hermandad, de la que el MADOC es hermano mayor honorario, sabe sin embargo que lo importante es la vida de fe, amor y entrega. “Yo les estoy quitando un poco de ilusión, pues les recuerdo que el objetivo de la Cuaresma es la conversión”, nos cuenta el consiliario y capellán coronel castrense, D. Francisco Nistal. “La salida es un acto más de los que tenemos en la hermandad siendo discípulos de Jesús, siendo “Amor y Entrega”, como lo fue Jesús y estamos llamados a ser cada uno de nosotros”.
La hermandad recuerda así la Eucaristía tan entrañable que vivieron el año anterior a la pandemia, cuando la lluvia impidió la salida procesional y los fieles abarrotaban el Monasterio de la Concepción. “¡Estábamos que no cabíamos!, pero todo el mundo recuerda esa Misa. No procesinamos en la calle pero salimos todos”, recuerda Nistal. “Todos participamos verdaderamente en esa Mesa del Señor que sustituyó a la estación de penitencia”.
Aun con todo, la hermandad anima a que todos puedan disfrutar de esta “catequesis plástica” como es la salida procesional de los titulares por su carrera oficial, en un año en que además estrenará varios himnos dedicados a María Santísima de la Concepción, como la nueva marcha procesional titulada “El primer Sagrario de Dios” compuesta por Elías Santiago Vico.
“Todo el mundo dice que que cuando nuestra titular sale a la calle, tiene un perfume especial”, explica el consiliario. “Este año, además, lo tendrá aun más pues nuestra Salve a la María Santísima de la Concepción ha sido adaptada para que el pueblo, y no solo el coro, pueda cantarla en comunión”.
Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social