Hace más de 50 años, la Orden de las Comendadoras de Santiago, que hoy lunes 25 de julio es un día grande para ellas porque festejan a su patrón, Santiago Apóstol, llamaba la atención de la joven Ana Elisa Ruiz, natural de Pórtugos. Ya se encontraba en Granada, cuando Ana Elisa conoció a las hermanas de esta Orden “y me encantaron”, sintiendo la llamada de Dios a vivir desde la vida religiosa en este lugar.

Han pasado 50 años desde que en mayo de 1972 profesara su vocación religiosa en esta Orden, que tiene su convento en la ciudad de Granada, con servicio de hospedería y dedicadas a la oración. Precisamente, la oración ha sido “mi trabajo en estos 50 años, que es lo principal que nosotras tenemos”, explicaba la madre Ana Elisa Ruiz. “Somos de clausura constitucional”, y aunque se dedican a la asistencia, a la hospitalidad y acogida al peregrino, y ayuda al más necesitado, la oración es su principal tarea, como nos recuerda sor Ana Elisa.

El pasado 29 de mayo festejaba sus bodas de oro de profesión religiosa en el Real Monasterio de la Madre de Dios Comendadoras de Santiago, donde se haya esta comunidad religiosa con más de 500 años de historia. Ese día, concelebraban la Eucaristía 23 sacerdotes que quisieron acompañarla, así como un numeroso pueblo de Dios, entre amigos, familiares y fieles de la iglesia del convento. Entre ellos, también estaba la el Consejo Federal de la Orden, con su responsable al frente.

“LO QUE MÁS LLEVO EN EL CORAZÓN ES MI VOCACIÓN”
El camino recorrido es largo, pero madre Ana Elisa tiene claro que continuará viviendo su vocación religiosa “igual que antes, no hay por qué cambiar. Perfeccionándose uno y no hay por qué cambiar”, señala.

“Lo que más llevo en el corazón en estos 50 años es mi vocación. En los 50 años no he pensado en otra cosa, nada más que en mi vocación, en servir a Dios, con alegría y entusiasmo aquí en el convento de las Comendadoras de Santiago”.

Hoy, de nuevo, madre Ana Elisa Ruiz ha compartido con toda la comunidad religiosa y el pueblo de Dios granadino otra gran festividad como lo fue el día de su profesión: la del patrón de la Orden, Santiago Apóstol, en la que decidió hace 50 años vivir la vida cristiana. “La festividad de Santiago Apóstol es muy importante para nosotros, la mayor, porque es nuestro patrón. Nosotros lo celebramos con una Eucaristía con toda solemnidad y hay militares, porque es una orden militar”, subraya.

Madre Ana Elisa Ruiz ha vivido “toda una vida”, como ella misma califica estos 50 años, con agradecimiento y alegría y hace una invitación a todos para rezar por las vocaciones en los conventos: “Que el Señor mande monjas a los conventos, ni digo ni al mío ni a otro. Digo que mande vocaciones a los conventos, que se necesitan”.

Paqui Pallarés
Delegada de Medios de Comunicación Social