Guadix
Cuaresma en familia
El pasado 13 de marzo, se llevó a cabo un retiro espiritual de Cuaresma, en la Casa de Espiritualidad de Guadix, organizado por la delegación diocesana de Familia y Vida y dirigido por el sacerdote y consiliario de esta delegación, Antonio Fajardo. Ha tenido una gran acogida y el sentir general de todos los asistentes ha sido de volver a repetir la experiencia.
Además de la familia de sangre, debemos tener en cuenta que pertenecemos a otra familia, la fundada por Cristo, cuyo vínculo es el vínculo de la fe. Cuaresma, camino hacia el triunfo: “no debemos quedarnos en la muerte del Señor, ya que, de lo contrario, no vivimos la gracia de la Pascua, tiempo fundamental de un cristiano”, así comenzaba el director del retiro este encuentro de Cuaresma, que, en su primera meditación, nos introdujo en la importancia de vivir la Cuaresma (camino de conversión) en familia, de examinar nuestra forma de actuar y cambiar, para hacernos a imagen y semejanza de Dios: “Hay que romper el molde”. Para ello hay que quitar muchas cosas de nuestras vidas.
Cuaresma es volver a Dios, pero sin miedo, y hacerlo en familia, siendo conscientes de nuestros pecados y cambiando todo lo que nos aleja del Creador, vino a decir Antonio Fajardo en sus reflexiones.
El retiro se desarrolló durante la mañana y la tarde del domingo. Comenzábamos con una meditación, seguida de una pausa-café y posteriormente la exposición del Santísimo, ayudados por los cantos de Alex y Miriam. Tras la reserva, y previo a la comida, hubo celebración de la Santa misa.
Después de la comida, y cómo es costumbre ya en nuestros retiros, pudimos disfrutar de un rato de diálogo entre todos los asistentes, tras las palabras del consiliario Antonio Fajardo. Fue un momento muy enriquecedor para todos los asistentes, ya que se trataron temas de vital importancia para la defensa de la familia y de la vida. Concluimos este retiro con el rezo del santo Rosario.
Jesús e Inma
Delegados de Familia y Vida