Guadix
Bendición del Niño Dios de la Divina Misericordia
en la parroquia de Santiago
El próximo día 25 de julio, festividad de Santiago Apóstol, a las 20:00 en la Parroquia de Santiago Apóstol de Guadix se bendecirá la imagen del Niño Dios de la Divina Misericordia.
Se trata de un niño Jesús que, a partir del 1 de agosto, en la iglesia de Santa María de las Lágrimas y San Agustín, se encontrará expuesto a la veneración en horario de lunes a domingo de 9:00-14:00 y 18:00-21:30.
Desde el punto de vista artístico estamos ante una joya manierista de principios del siglo XVIl . que llega a la Hermandad de las Lágrimas después de una convulsa historia de intervenciones poco afortunadas hasta que es donado a la Hermandad, procedente de una familia que lo disponía de generación en generación.
Este Niño Jesús Salvador del mundo sufre también las consecuencias de la guerra civil española, donde soporta un brutal deterioro, siendo amputado por manos y cintura además de otras pérdidas, por ser pateado y tirado por la ventana del cortijo donde se encontraba.
Es el pasado año, cuando la Hermandad de las Lágrimas le encomienda la laboriosa tarea de restauración al licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Granada, Serafín Hidalgo, que aplicando técnicas de fijación y conservación de la policromía original, eliminación de repintes, reintegrado de zonas del soporte mutiladas (brazos y torso) y reintegración cromática de toda la obra, ha conseguido darle el estado actual e incluso cercar la autoría en el gran escultor Bernabé de Gaviria, compañero y, por tanto, contemporáneo a la escuela del imaginero Pablo de Rojas.
Desde el punto de vista espiritual, la Hermandad pretende animar con esta imagen a la devoción a la Divina Misericordia, festividad establecida por San Juan Pablo II el Domingo segundo de Pascua, a raíz de las apariciones de Jesús a Santa Faustina Kowalska.
Durante su festividad, la Hermandad de las Lágrimas celebrará la coronilla de la Divina Misericordia y una procesión infantil con la imagen, para, a través de la Divina Misericordia, vivir la compasión por parte de Dios como un acto de gracia basado en la confianza y el perdón.
José Raya