“El Economato nació al darnos cuenta de la necesidad de acompañar a las familias pero que no bastaba solo con darles alimentos, quisimos poner nuestro grano de arena para pudieran salir adelante y crecer como personas potenciando habilidades y capacidades”, asegura D. Juan Carlos Carrión, párroco de Jesús Obrero desde hace más de 20 años y uno de los iniciadores de este proyecto que ha llenado de solidaridad, superación y nuevos horizontes a muchos de los feligreses y vecinos del Almanjáyar.

Después de 8 años, el Economato Socioeducativo cuenta hoy con programas de asistencia en alimentación, programa de empleo e inserción laboral, asistencia para superar la brecha digital, formaciones y talleres, y acompañamiento psicológico y educativo entre otras líneas de trabajo para la promoción de la dignidad de las personas más allá de la ayuda material, con la colaboración de diversas entidades.

POR LA DIGNIDAD Y PROMOCIÓN DE LAS PERSONAS
El pasado mes de junio el equipo de 15 educadores y trabajadores sociales, junto con los 25 voluntarios que dedican su tiempo el Economato se reunieron en un “ambiente familiar” para celebrar este octavo aniversario, en el que además se inauguró una nueva sala dentro del Economato, que ya ocupa dos locales contiguos a la parroquia de Jesús Obrero. Solo en 2021 el Economato socioeducativo ALFA Almanjáyar acompañó a 120 familias.

“Solo puedo dar las gracias por todo lo que están haciendo por mi a las personas que hacen posible el Economato, a mi me han ayudado mucho, especialmente en los peores momentos. Para mí lo mejor es la empatía y sentir que entienden la dificultad por la que estas pasando aunque no la vivan, la empatía y la acogida a todos. Nunca he visto a ninguna persona llegar a la parroquia y recibir una negativa. Gente muy dispuesta a ayudar, solo tengo buenas palabras”, destaca agradecida María José Fernández, vecina del barrio.

“Para mí como responsable del economato y trabajador social es muy gratificante formar parte de este proyecto, el agradecimiento que recibes de las personas que acuden, y a nivel personal es algo que te hace crecer muchísimo”, comenta Álvaro Fontana que se unió al Economato para acoger y acompañar a las familias necesitadas desde 2019. Primeramente son recibidas en el Economato para identidicar cuales son sus necesidades y se les ayuda a establecer objetivos y compromisos de mejora con ellos mismos y con su realidad.

Asimismo, para D. Juan Carlos Carrión, es un “privilegio” poder ayudar y acompañar la vida de las familias del barrio. “En el Economato vemos diariamente gestos preciosos de solidaridad y fraternidad entre familias, de cercanía y acogida”, afirma el sacerdote.

María José Aguilar