21 marzo 2021
1371 • AÑO XXIX

INICIO - Mirada

En la iglesia parroquial Sagrario-Catedral

Las 24 horas de misericordia en Granada

A las 17 horas del pasado viernes 12 de marzo arrancaron las 24 horas para el Señor. La iglesia parroquial Sagrario-Catedral albergó esta iniciativa que invitaba a dedicar un tiempo de oración y reconciliación con el Señor. Decenas de granadinos se acercaron para adorar al Santísimo Sacramento Y participar de sacramentos como la Confesión, la Santa Misa o la Unción de Enfermos. 

La diócesis de Granada secundó esta iniciativa del Papa Francisco para el tiempo de Cuaresma. Se trata de dedicar 24 horas a estar frente al Señor, en actitud de adoración e invitando al Sacramento de la Reconciliación. Él perdona todas tus culpas ha sido el lema de este año, un versículo del salmo 103 con claro espíritu cuaresmal.

“Un tiempo de silencio, tiempo de adoración, tiempo para bendecir al Señor y para adorarlo y tiempo para convertirnos al Señor”, decía D. Juan Gutiérrez, párroco de la iglesia-Sagrario al inicio de la jornada, que empezó con una hora de adoración frente al Santísimo Sacramento.

Desde esta oración e invitación a la reconciliación, las 24 horas para el Señor se convirtieron en una fiesta de la Misericordia. “Al Señor no le importan nuestros pecados, al Señor le importamos nosotros. Su amor es infinito y sabe que lo que deteriora nuestra vida es el pecado. Él quiere quitarnos todo eso, precisamente porque le importamos nosotros”, dijo el Vicario General, D. Francisco-Javier Espigares, se unió a esta iniciativa presidiendo la celebración penitencial del viernes.

El sábado continuaron estas 24 horas con el rezo de Laudes, Eucaristía y Adoración al Santísimo, en una mañana en la que también estuvieron presentes los seminaristas. A ello le siguieron el Rosario por la Vida junto a los representantes de la Pastoral Familiar de Granada, que aprovecharon para seguir dando a conocer los Proyectos Ángel y Raquel.

Después del rezo del Ángelus a mediodía, el delegado de la Pastoral de la Salud, D. Diego Molina, acudió para administrar el sacramento de la Unción de Enfermos a un grupo de fieles.

El silencio fue el protagonista último de la Jornada tras la lectura meditativa de la Pasión según San Mateo. Un silencio que solo rompieron las palabras del Delegado de la Pastoral Familiar, D. José Antonio Villena, con un texto que invitaba a profundizar en el amor y la Misericordia del Señor por cada hombre.

Tras la bendición y reserva del Santísimo, las 24 horas con el Señor concluyeron con el rezo de Vísperas y la Eucaristía a las 17 horas.

Ignacio Álvarez