Nº 1347 • AÑO XXVIII
INICIO - Mirada
Jornada Mundial del Migrante y Refugiado
“La mesa de la acogida que es la de la Eucaristía”
Celebración de la Santa Misa en la Catedral el 26 de septiembre, con motivo de la Jornada Mundial del Migrante y Refugiado, con el lema Como Jesucristo, obligados a huir.
Con el objetivo de orar y poner rostro al drama humano de las personas migrantes migraciones y refugiadas, que se ven obligadas a huir de sus lugares de origen por motivos de inseguridad, hambre, violencia y guerras, la Catedral acogía el pasado 26 de septiembre la Eucaristía por esta intención.
La Santa Misa en la catedral tuvo lugar en la víspera de la Jornada Mundial del Emigrante y Refugiado, que, con el lema Como Jesucristo, obligados a huir, se celebraba el domingo día 27 en la Iglesia universal.
LA “MESA DE LA ACOGIDA”
Nuestro arzobispo D. Javier ofició la Eucaristía, concelebrada por cerca de una decena de sacerdotes, entre ellos el Delegado diocesano de esta Pastoral, D. Manuel Velázquez. “Obligados a huir para salvar la vida o recuperar la dignidad”, explicó D. Manuel en su alocución inicial. Partiendo de las palabras de Jesús –“Venid a Mi los que estéis cansados y agobiados, que Yo os aliviaré”-, el Delegado diocesano subrayaba “la mesa de la acogida que es la mesa de la Eucaristía”.
En esta celebración, nuestro arzobispo D. Javier subrayaba también la familia de hijos de Dios que somos todas las personas y miembros de un solo Cuerpo de Cristo, en la Iglesia, “como una sola familia, un solo pueblo”. “El único Cuerpo de Cristo, miembros de ese Cuerpo, ensamblados unos con otros, del mismo modo que los miembros del cuerpo humano”, explicó Mons. Martínez en su homilía. (Escuchar homilía)
MENSAJE DEL PAPA
Las palabras dirigidas por el Santo Padre a la Iglesia Universal con motivo de esta Jornada también estuvieron presentes.
Al inicio de la liturgia eucarística, la Pastoral de Migraciones presentaba las realidades y el trabajo diocesano siguiendo la indicación de acciones concretas del Papa Francisco en dicho Mensaje. Indicaciones que, a los verbos de la edición de 2018 –“acoger, proteger, promover e integrar”-, el Papa Francisco añadía “seis parejas de verbos, que se corresponde a acciones muy concretas” en su Mensaje de este año 2020: conocer para comprender, hacerse prójimo para servir, reconciliarse para escuchar, crecer para compartir, involucrar para promover y colaborar para construir.
REALIDADES DIOCESANAS DE ACOGIDA Y ACOMPAÑAMIENTO
En este marco, al inicio de la Santa Misa se presentaba una realidad incipiente en la que ya está trabajando la Pastoral de Migraciones, llamada Brotes del Genil. Se trata de tierras cedidas por sus propietarios para ser custodiadas y cultivadas por inmigrantes y jóvenes en riesgo de exclusión social, fomentando así su capacitación laboral y la agricultura ecológica.
También se presentó el trabajo que se está realizando para recuperar el centro San Francisco Javier en Haza Grande, donde se capacita laboralmente a jóvenes inmigrantes y en riesgo de exclusión social con talleres ocupacionales. El trabajo que desarrolla la Pastoral de Migraciones, el grupo de acogida de Motril que atiende a los inmigrantes llegados a nuestro litoral granadino y el grupo de acogida en Zafarraya son otras de las realidades presentadas y ofrecidas al inicio de la Santa Misa, para orar por todos aquellos que sufren a causa de las migraciones y por quienes trabajan para hacer más humano este drama del siglo XXI.
TESTIMONIO Y DANZA BOLIVIA
Antes de la bendición final, la Santa Misa concluyó con el testimonio de Mónica Durán, peruana que colaboró con esta Pastoral en Granada y actualmente atiende refugiados en Alemania, donde se marchó hace 11 años. (Leer noticia)
Asimismo, un grupo de personas bolivianas, ataviadas con sus trajes típicos, ofreció una danza de su país como acción de gracias a Dios. Nuestro arzobispo bendecía también la pequeña Imagen de la Virgen María que les acompañaba, que hizo extensible a todo su país y a los presentes.
Paqui Pallarés
