Nº 1329 • AÑO XXVIII
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Volcadas en la pandemia del Covid-19
Siervas de María, fieles intercesoras de los enfermos
y necesitados en tiempos de pandemia
En este periodo de dificultad por la crisis del COVID-19, la Congregación de las Siervas de María y Ministras de los Enfermos en Granada han intensificado de manera especial la oración e intercesión ante el Santísimo por los enfermos más necesitados, ofreciéndoles así su cuidado desde la distancia y continuando con su misión activa “desde casa” también al servicio de los más pobres.
Desde el año 1928, las Siervas de María y Ministras de los enfermos del convento ubicado en la calle/Niños Luchando s/n, en pleno centro de Granada, realizan su labor de cuidado de los enfermos y de los más pobres, una tarea que durante el confinamiento están realizando “desde casa” a través de la adoración e intercesión ante el Santísimo Sacramento. De esta forma, es ante el Señor Resucitado y sacramentando que esta comunidad de religiosas continúa entregando sus vidas al servicio de los enfermos y necesitados para que Dios sea cuidado, cura y consuelo para ellos en estos tiempos de dificultad por la pandemia.
Debido a la pandemia las Siervas han sustituido su principal apostolado sanitario, tarea que llevan a cabo principalmente a cargo de las enfermerías de las Siervas del Evangelio y la de las Capuchinas antes del confinamiento, aun así, la misión continúa con oración, al cuidado de las religiosas de la congregación de mayor edad y con dolencias, y ayudando al prójimo a imitación del Buen samaritano.
“Ahora llevamos a cabo nuestra misión desde casa, desde la oración más intensa, más contemplativa, quizás algo que dentro de nuestra rutina activa no podemos dedicar tanto tiempo, y seguimos atendiendo también desde la reja a las personas que acuden al convento en busca de ayuda, alimentos u otras necesidades. Le pedimos a Dios por todos los que están sufriendo con esta situación que estamos viviendo”, afirma Sor Jacinta, Superiora de la Congregación en Granada.
SIERVAS DE GRANADA
Las Siervas de María y Ministras de los enfermos, congregación religiosa fundada en Madrid, en 1851, por la joven Manuela Torres Acosta, (sor María Soledad) y el sacerdote D. Miguel Martínez, llegó a nuestra diócesis de Granada estableciéndose con una pequeña comunidad de tres religiosas en la calle Soares nº 4, a la que posteriormente se unieron otras siervas y Madre Soledad que durante su estancia en Granada, en sus primeros días, condujo a la congregación en Granada ante su patrona, a la Basílica de las Angustias, confiando así su misión en la diócesis, inspirada en el versículo: “Estuve enfermo y me visitasteis” (Mt. 25,36), a la protección materna de Nuestra Señora de las Angustias.
Después de establecer el convento en diferentes localizaciones, fue a principios del siglo XX cuando el convento se estableció en la calle Niños Luchando, n º 8, donde se mantiene actualmente, y desde donde continúan hoy, ante las nuevas circunstancias derivadas por el Covid-19, su tarea muy apreciada por el pueblo granadino, en ayuda a los enfermos “solos con frío, dolor y soledad”.
María José Aguilar
