Nº 1309 • AÑO XXVIII
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Cine
The Two Popes

La película británica Los dos papas del cineasta brasileño Fernando Meirelles (un Oscar para El jardinero fiel y 4 nominaciones por Ciudad de Dios), cinta que llegará a Netflix estas navidades, ha sido nominada al Globo de Oro como mejor película.
La cinta ficciona la supuesta relación entre el cardenal Bergoglio, Arzobispo de Buenos Aires, y el Papa Benedicto XVI a principios de esta década que ahora termina. El núcleo del film se refiere a un viaje que el obispo argentino realiza a Roma para pedirle al Papa que acepte su renuncia por edad. Varios días viviendo con Benedicto XVI en sus dependencias personales conseguirán que nazca entre ellos una profunda amistad y que se revelen mutuamente dolorosos secretos.
Esta curiosa y costosa producción de Netflix, cuenta con dos grandes de la interpretación: Anthony Hopkins, en el papel de Benedicto XVI, y Jonathan Pryce en el de Jorge Bergoglio. La película, muy entretenida y emotiva, sería una gran obra sino tratase de personas reales y vivas, de sobra conocidas, y cuyas acciones y pensamientos están sobradamente documentados. Porque el hecho es que se separa tanto de la realidad que va incluso más allá de la caricatura. Especialmente en el caso de Benedicto XVI, completamente irreconocible en su versión cinematográfica.


Toda la parte final es muy bonita y emotiva, pero inverosímil y elaborada con mimbres falsos. El trasfondo de ese tramo es más o menos que Ratzinger queda seducido por la humanidad vitalista de Bergoglio, como si viera en el argentino lo que él nunca tuvo. En definitiva, si no tratara de personajes reales, estaríamos ante una cinta emotiva, simpática y humana, sobre un cascarrabias que se humaniza y es capaz de tomar una decisión que le redime de su pasado. Pero tratando de lo que trata es completamente inasumible como película basada en hechos reales.
Juan Orellana
Publicado en Pantalla 90
www.pantalla90.es